
Guadalajara Moderna / La Normal
ALCALDE 1221
SECRETARÍA DE ADMINISTRACIÓN
Esquina Ávila Camacho
Arquitecto: Jorge Ramírez Sotomayor
Propietario Original: Gobierno del Estado de Jalisco
Año de construcción: 1970
Al arquitecto Jorge Ramírez Sotomayor fue parte de los egresados de las primeras generaciones de la escuela de arquitectura de la Universidad de Guadalajara fundada por Ignacio Díaz Morales en 1948. Fue uno de los destacados alumnos de dicha escuela, compartiendo aula con otros destacados arquitectos tapatíos como Max Henonin, Eduardo Ibáñez, Gabriel Chávez de la Mora, Héctor Ascencio, entre otros.
Para mediados de los años 1950’s, el modernismo estaba en su apogeo, no solamente en arquitectura sino también en urbanismo y las artes. En Guadalajara, se construía la zona administrativa de la Normal, que no solamente incluía las aulas de la Escuela Normal de Jalisco, obra diseñada en 1958 por Enrique de la Mora, sino que en el área se levantaba un complejo administrativo que incluiría muchos edificios de gobierno como El Fondo de Arte y Cultura, El Registro Público de la Propiedad, el CODE, la Procuraduría Social, entre otros.

En el lugar privilegiado y más visible, frente a la Glorieta de la Normal, se asignó al arquitecto Ramírez Sotomayor el diseño del edificio de la Secretaría de Administración. Siguiendo las normas del modernismo, el edificio se encuentra alejado de las vialidades, rodeado de una gran explanada donde no pasa nada (hoy en día con una malla tipo Cercasel que la hace todavía más inútil). Parte de una basamento de dos niveles y arcos parabólicos, y al centro, un volumen cuadrado de 5 pisos de altura que termina en arcos de medio punto, éstos enmarcados con una marquesina que le da volumen. Me recuerda el diseño del edificio y el conjunto en general (guardadas las proporciones) al diseño de las explanadas interminables que Costa y Niemeyer diseñaron para Brasilia, ausentes de escala humana y una pesadilla para recorrer a pie. Al fin que en los 1960’s el auto era rey y todo era diseñado para llegar y ser visto en él.
Algunos elementos del diseño de Ramírez Sotomayor nos recuerdan la Casa de las Artesanías de Eric Coufal (la puerta principal con un diseño de cuadrícula de azulejo) y otros, toques regionales (la fuente de cantera con azulejos geométricos). Algún creativo decidió hace poco ponerle muros verdes al edificio y pintarlo bicolor, pésimo gusto. Con todo, el edificio es un buen ejemplo del modernismo de medio siglo veinte, con muchas posibilidades de mejorar, convirtiendo la explanada en un verdadero espacio público removiendo las rejas y poniendo bancas, y desde luego reemplazando los espantosos e invasivos ficus benjamina y reemplazándolos por pirules o jacarandas. De paso, despintando el horroroso amarillo de las banquetas y machuelos y convirtiendo el estacionamiento de empleados en un jardín. Todo se puede si hay voluntad.

Tal vez sería mas apropiado mencionar que el proyecto original era para albergar al Instituto de las Artesanías de Jalisco, por eso ese carácter arquitectónico. Ya muchos años más tarde se asignó a la secretaría de administración.
Gracias Rubén, ignoraba ese dato! Saludos!