Guadalajara Moderna / Colonia Lafayette
AV. CHAPULTEPEC 284
Esquina Lerdo de Tejada
Arquitecto: Bruno Cadore Marcolongo
Cliente: Seguros La Comercial
Año de construcción: 1968
Desde 1950 hasta inicios de los 1980’s, la ciudad de Guadalajara se transformó de una ciudad mediana y romántica, en una urbe moderna. La falta de sensibilidad de los políticos, urbanistas y arquitectos de la época (y sobra decirlo, de la población en general) consiguió que muchas de las obras arquitectónicas de finales del siglo XIX y principios del XX se destruyeran sin remordimiento, para dar paso a estructuras comerciales, calles, avenidas e infraestructura moderna.
Arquitectos de la recién fundada Escuela de Arquitectura de la Universidad de Guadalajara, entre los cuales destacaron Ignacio Díaz Morales, Julio de la Peña, Enrique Nafarrate, Max Henonin, Eric Coufal y otros más, transformaron la ciudad en pocos años. El ímpetu del progreso nublaba cualquier remordimiento al destruir calles y fincas que recordaran el pasado provincial y «bicicletero» de Guadalajara. Así, cayeron en la batalla edificios importantes y emblemáticos de la ciudad (véase: Los Edificios que Guadalajara Extraña), calles como San Francisco dieron paso a avenidas de alto tráfico como 16 de Septiembre; y se crearon esperpentos urbanos como la Av. Enrique Díaz de León y la misma 16 de Septiembre.
Las ideas de los arquitectos antes mencionados, son hoy debatidas con fuerza. Admiradores por un lado, que siguen sus filosofías de diseño hasta el día de hoy (Enrique Nafarrate sigue enseñando en el ITESO), y otros que, con una percepción distinta del pasado, los culpan por al destrucción sin remordimiento de mucho del pasado colonial y porfirista de nuestra ciudad, en especial la destrucción de parte del primer cuadro para la creación de Avenidas y la construcción de la Cruz de Plazas, y la demolición de las grandes fincas de las clases altas tapatías en las «Colonias», sobre todo en el Boulevard Lafayette, hoy «nacionalizado» con el nombre de Av. Chapultepec.
Es precisamente sobre esta avenida que en 1968, uno de los miembros fundadores de la Escuela Tapatía de Arquitectura, el italiano Bruno Cadore, diseñó este edificio comercial, dando parte de un chalet porfirista. Justo enfrente de éste, se encontraba también uno de los chalets mas destacados de la ciudad, el Chalet Ferreira, obra del arquitecto Enrique Choistry. Cadore diseñó un edificio de cinco niveles, al estilo moderno y minimalista siguiendo los pasos del Estilo Internacional de Mies. La planta baja contiene locales, donde se instaló la tienda el Nuevo París, y sobre ellos cuatro niveles de oficinas para al aseguradora, cuyas fachadas sur y oriente están diseñadas con bandas horizontales de cristal arriba y mármol de Carrara abajo. Un muro de cantera amarilla complementa parte de la fachada de la Avenida Chapultepec.
Lejos del sentimiento que origina el saber que este edificio reemplazo una hermosa casona porfiriana, debemos notar que el proyecto del arquitecto Cadore está bien logrado. La elección de materiales y las proporciones del edificio le han permitido que, después de 53 años, siga conservándose de forma notable. Los materiales como la piedra natural, junto con el uso del vidrio y aluminio siguen hoy en día vigentes, y salvo temas de diseño obsoletos (como la falta de estacionamiento o las alturas reducidas) el edificio conserva su valor comercial. Es además un buen ejemplo de la escala y la densidad que nuevos edificios en la zona deben buscar, ante la inminente repoblación residencial y comercial de la zona.
