Guadalajara Moderna / Centro

PEDRO MORENO 701
Casa Sauza-Carballo

Esq. Pavo

Arquitecto: ?
Propietario Original: ?
Año de construcción: Aprox. 1920

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La casa de Elpidio Sauza: elegancia afrancesada en el corazón de Guadalajara

Construida hacia la década de 1920 por el tequilero Elpidio Sauza, esta elegante residencia ubicada en Pedro Moreno 701 es un testimonio más de la opulencia y sofisticación con la que algunas familias ligadas a la industria del tequila definieron su presencia en la ciudad. Su diseño recuerda poderosamente al de otra notable casa edificada algunos años antes por don Aurelio López Rosales, también tequilero, en la avenida Alcalde número 350.

Ambas compartían una característica peculiar: el patio central estaba techado para permitir que el carruaje —y más adelante el automóvil— ingresara directamente hasta el pie de la escalera central. Este detalle, más común en ciudades del norte o en mansiones rurales, hablaba de un estilo de vida donde la comodidad y el estatus se encontraban en cada gesto arquitectónico.

La fachada de esta casa responde al gusto ecléctico afrancesado que dominó durante el porfiriato tardío y aún sobrevivía en los años posteriores a la Revolución. Aunque más sobria que su contraparte en Alcalde, conserva una gran dignidad en su composición. Su simetría es clara, con un cuerpo central saliente flanqueado por columnas corintias adosadas que enmarcan tres vanos verticales. Sobre ellas, un balcón corrido refuerza la imagen palaciega del conjunto. Ventanas en arco de medio punto, cornisas con ménsulas y un parapeto decorativo con balaustrada completan la escena, aún visibles a pesar del deterioro y el grafiti.

Con el paso del tiempo, la casa pasó a manos del empresario español Domingo Carballo Espada, originario de Ourense, quien tras llegar a México vía Chihuahua se estableció en Guadalajara. Carballo fue uno de los grandes comerciantes de su época, y su fortuna se reflejaba también en sus propiedades. Por un tiempo, la finca albergó el célebre «Casino Catalán», añadiendo un capítulo social y cultural a la historia del inmueble.

Hoy, a pesar del abandono y el descuido, la casa de Elpidio Sauza permanece como una pieza clave del rompecabezas arquitectónico del Centro Histórico. Su presencia nos recuerda la Guadalajara que apostó por el esplendor europeo, adaptado a una tierra de agaves y comercio pujante.

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*Villaseñor y Villaseñor, T. III, p. 145